Revolucione su taller con el calentador por inducción, la herramienta definitiva para aflojar tuercas, pernos y otros componentes metálicos difíciles. Aprovechando el poder de la tecnología de calentamiento por inducción, este dispositivo innovador ofrece un calor rápido, preciso y localizado para abordar incluso las tareas más desafiantes con facilidad.
Extracción de sujetadores
Tuercas, pernos y espárragos agarrotados: Las tuercas y pernos oxidados o demasiado apretados son una gran pérdida de tiempo. Los calentadores de inducción calientan rápidamente el elemento sujetador sin afectar las piezas circundantes, lo que permite un aflojamiento más fácil.
Espárragos del colector de escape: Los espárragos del colector de escape rotos o congelados pueden ser una pesadilla. El calentamiento por inducción rompe la unión de la corrosión y permite la extracción con un riesgo mínimo de daños.
Sensores de oxígeno (O2): Retire los sensores de O2 congelados de forma segura. El calor localizado del calentador de inducción evita dañar el sensor y los componentes circundantes.

Manipulación y reparación de piezas
Instalación y remoción de rodamientos: El calor por inducción expande los rodamientos para una fácil instalación en los ejes o carcasas. Para retirarlos, ayuda a encoger la pista del rodamiento, liberándola de los ejes agarrotados.
Eliminación de abolladuras: Caliente suavemente las abolladuras menores en los paneles de la carrocería, haciendo que el metal sea más maleable para remodelar o quitar.

Trabajo con adhesivos y selladores
Retirada del parabrisas: Ablande los adhesivos que sujetan los parabrisas en su lugar para una extracción más rápida y limpia, minimizando el riesgo de romper el vidrio.
Eliminación de calcomanías/envolturas de vinilo: Ablande el adhesivo detrás de las calcomanías o envolturas de vinilo, lo que permite despegarlas más fácilmente.

Usos adicionales
Soldadura fuerte y blanda: El calor localizado y preciso permite unir componentes metálicos sin sobrecalentar el área circundante.
Endurecimiento y templado: Ajuste la dureza y ductilidad de piezas metálicas específicas para mejorar sus propiedades.
Corrección de deformación: Caliente suavemente las piezas de metal deformadas o torcidas para facilitar su realineación.